El Barça ha superado el primer partido post-lesión de Leo Messi con una ajustada victoria sobre un amenazador Sporting de Gijón. Tras una esperanzadora salida del vigente campeón, con un rombo en el centro del campo, los asturianos han conseguido neutralizarle hasta el punto de hacerle cambiar de planes. El equipo ha tenido que buscar los mecanismos de siempre y se ha guardado lo mejor para la segunda parte. Ha sido el gol de Villa. Vale tres puntos de confianza.
Iniesta hace de Messi
Guardiola ha innovado con un dibujo 4-4-2, con Busquets de medio centro, Keita y Xavi de volantes e Iniesta de media punta. Bojan y Villa se situaban de arietes. O sea que Andrés Iniesta tenía que hacer olvidar a Messi. Se lo tomó al pie de la letra. El '8' ha estado excelso. Suya ha sido la primera oportunidad, en el minuto 9, calcada al gol que marcó en la final del Mundial. En este caso, sin embargo, el portero Cuéllar ha estado mucho más acertado que Stekelenburg y ha desviado el balón a córner.
Cambio de esquema
Al principio, la apuesta de Guardiola funcionaba. Había sorprendido al Sporting. El equipo se sentía cómodo, dominante. Poco a poco el rival se ha rearmado y ha podido colapsar el ataque del Barça, poco profundo por las bandas. Con orden y Cuéllar perdiendo tiempo descaradamente, los visitantes se habían salido con la suya. En el minuto 32, Villa se ha abierto una brecha entre la defensa, pero su disparo ha salido demasiado cruzado. A continuación, Guardiola ha optado por reencontrar el exitoso 4-3-3. El juego se ha vuelto más alegre. Ligeramente.
Providencial Villa
Piqué y Pedro han aportado más garra en el segundo tiempo, que ha empezado con gol. Villa, rompiendo el fuera de juego, ha recibido una sensacional asistencia de Alves y ha batido al equipo de sus orígenes con un disparo inapelable (min 49). La maquinaria culé engrasaba. La afición respiraba tranquila. El Sporting se ha visto obligado a estirar las líneas y los espacios eran más evidentes. Manolo Preciado ha quemado sus últimos cartuchos haciendo entrar a algunos de los teóricos titulares que habían rotado.
Fortaleza azulgrana
Era el momento de finiquitar el partido. Ante la imposibilidad de ampliar la ventaja (faltaba fluidez ofensiva), el Barça ha asegurado el triunfo sin hacer concesiones. De hecho, el Sporting no ha chutado entre los tres palos en todo el encuentro. Su embestida final no ha sido suficiente. Un Guaje le había sentenciado.
Fuente:
www.fcbarcelona.com
Iniesta hace de Messi
Guardiola ha innovado con un dibujo 4-4-2, con Busquets de medio centro, Keita y Xavi de volantes e Iniesta de media punta. Bojan y Villa se situaban de arietes. O sea que Andrés Iniesta tenía que hacer olvidar a Messi. Se lo tomó al pie de la letra. El '8' ha estado excelso. Suya ha sido la primera oportunidad, en el minuto 9, calcada al gol que marcó en la final del Mundial. En este caso, sin embargo, el portero Cuéllar ha estado mucho más acertado que Stekelenburg y ha desviado el balón a córner.
Cambio de esquema
Al principio, la apuesta de Guardiola funcionaba. Había sorprendido al Sporting. El equipo se sentía cómodo, dominante. Poco a poco el rival se ha rearmado y ha podido colapsar el ataque del Barça, poco profundo por las bandas. Con orden y Cuéllar perdiendo tiempo descaradamente, los visitantes se habían salido con la suya. En el minuto 32, Villa se ha abierto una brecha entre la defensa, pero su disparo ha salido demasiado cruzado. A continuación, Guardiola ha optado por reencontrar el exitoso 4-3-3. El juego se ha vuelto más alegre. Ligeramente.
Providencial Villa
Piqué y Pedro han aportado más garra en el segundo tiempo, que ha empezado con gol. Villa, rompiendo el fuera de juego, ha recibido una sensacional asistencia de Alves y ha batido al equipo de sus orígenes con un disparo inapelable (min 49). La maquinaria culé engrasaba. La afición respiraba tranquila. El Sporting se ha visto obligado a estirar las líneas y los espacios eran más evidentes. Manolo Preciado ha quemado sus últimos cartuchos haciendo entrar a algunos de los teóricos titulares que habían rotado.
Fortaleza azulgrana
Era el momento de finiquitar el partido. Ante la imposibilidad de ampliar la ventaja (faltaba fluidez ofensiva), el Barça ha asegurado el triunfo sin hacer concesiones. De hecho, el Sporting no ha chutado entre los tres palos en todo el encuentro. Su embestida final no ha sido suficiente. Un Guaje le había sentenciado.
Fuente:
www.fcbarcelona.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario